Antiguamente, una de las formas de conservación de la carne, era en manteca o en aceite. Se freía, y se metía dentro de orzas. También se conservaban de esta forma los chorizos, las morcilla, las costillas...
Antes de freírla se adobaba con diferentes especias. Se conserva muchísimo tiempo. Yo lo conservo en el frigorífico por seguridad. En casa, aunque tenemos un sótano en el que se podría conservar en optimas condiciones, no hace el frío de antiguamente. Si viviera en el cortijo no dudaría en hacerlo porque aún en verano, la temperatura es inferior. De hecho, alguna vez guardo chorizos, que vienen muy bien para la "ligá". Y allí si lo guardo en una orza.
INGREDIENTES
1 Trozo de lomo de cerdo de de 1.200 gr.
8/10 dientes de ajo
Sal
Cominos
Matalauva
Orègano
Pimentón dulce
Vinagre
Agua
Aceite de oliva virgen o manteca
PREPARACION
Cortar el lomo en trozos grandes
Para el adobo, ponemos los ingredientes en el mortero. Yo le pongo estas especias, pero pueden ser otras, según el gusto. Para esta cantidad de carne pongo una cucharadita de cada una. Y la verdad, las pongo en la thermomix, porque es más rápido y me duelen menos las manos. Se le pone un chorreón de vinagre y un poco de agua.
Dejamos la carne con el adobo en el frigo por 24 horas como mínimo.
Pasado ese tiempo, ponemos en una sartén honda o en una olla, manteca de cerdo o aceite. A mí me gusta con manteca.
La calentamos y ponemos los trozos de lomo para que se confiten. Es importante hacerlo a baja temperatura. Nos interesa que se hagan bien por dentro para evitar que se estropeen.
Pasada por lo menos media hora, sacar los trozos de carne. Los vamos poniendo en los frascos en que los vamos a conservar. Bien limpios y esterilizados (con haberlos lavado en el lavavajillas es suficiente ).
La manteca la dejamos reposar. Y después rellenamos los frascos.
Los posos que han quedado en la sartén, están riquísimos en una tostada.
Cuando estén los frascos completamente fríos, los podemos guardar en el frigo o en un lugar muy fresco y oscuro.
Dura muchísimo tiempo y siempre se tiene a mano un aperitivo, cena o comida como acompañamiento a unos huevos fritos y unas patatas a lo pobre. De hecho el plato alpujarreño siempre lleva unos trozos de lomo de orza.
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