Mantecados

 Llegan estas fechas y además de decorar la casa para la Navidad, es hora de hacer mantecados, entre otras cosas que iré enseñando.

Estos mantecados no son de la familia. Los aprendí de una amiga. Mi madre no hacía mantecados, le gustaba hacer más,  dulces de Semana Santa.

Son fáciles de hacer pero se necesitan una horitas. Yo llevo unos años haciéndolos con mi amiga Ana y echamos una tarde de charla, risas, confidencias y unas tacitas de te.

INGREDIENTES

1 kg de harina de repostería

300 gr de almendras peladas

400 gr de azúcar

400 gr de manteca de cerdo ibérico

canela

sésamo o ajonjolí

PREPARACIÓN

Yo utilizo  la thermomix, pero  puedes utilizar otro triturador.

Lo primero es tostar las almendras. Las ponemos en una bandeja de horno y las ponemos a 180 grados arriba y abajo. Cada horno es un mundo, por lo que es mejor estar atentos porque de estar blancas, en un momento se queman. 

Mientras se tuestan las almendras, ponemos el azúcar en la thermomix, para hacerla glass. Apartamos un poco de este azúcar para espolvorear al final los mantecados ya terminados.

Después de tostar las almendras,  las trituramos a gusto de cada uno. A mi me gusta dejar trocitos.

En la bandeja de horno ponemos el kg de harina para tostarla. Hay que ir dándole vueltas para tostarla homogéneamente.

En una bandeja ponemos el azúcar, las almendras y la manteca, que habremos tenido unas horas a temperatura ambiente para que esté blandita.  Ponemos también una cucharadita de canela molida.

.Mientras se tuesta la harina y sin perderla de vista, vamos integrando entre si los ingredientes que pusimos en la bandeja.

Cuando esté la harina tostada, y caliente, se incorpora al resto de ingredientes, y con una cuchara vamos amasando nuestros  mantecados.

Una vez homogénea la masa, vamos extendiéndola poco a poco  y vamos haciendo los mantecados con un vaso de tubo.

Se van poniendo con cuidado en la bandeja del horno, y se pone por encima un poco se ajonjolí.

Se meten al horno hasta que estén doraditos. Los sacamos y con un colador, los espolvoreamos con el azúcar glass que apartamos anteriormente.

Los ponemos a enfriar y cuando estén frios los vamos envolviendo en los papelillos.

Estos papelillos los compro en especias Barranco, en la calle Puentezuelas.